Como inmigrante de Ecuador, ofrezco un enfoque de asesoramiento único a mi diversa clientela. Mi etnicidad como mestiza juega un papel vital en mi rol como consejera. Aunque mestiza es el grupo cultural en el que nací y con el que me identifico, debo decir que también encuentro significado en mi cultura familiar. Mudarme a los Estados Unidos cuando era adolescente me ayudó a comprender los desafíos que enfrenta un inmigrante para adaptarse a una nueva cultura. Cuando me convertí en adulto, noté cómo mis antecedentes influyen en la forma en que pienso, siento y me comporto. He buscado entrenamiento que ha profundizado mi desarrollo de cómo funciona la mente y el cuerpo.

Mi título de posgrado en Psicología de la Salud me ayudó a comprender los factores psicológicos involucrados en el comportamiento y la salud física y la enfermedad. A través de mi trabajo con sobrevivientes de violencia doméstica y abuso sexual, descubrí mi verdadera vocación como consejera. A través de capacitaciones avanzadas en EDMR y SE, desarrollé las habilidades necesarias para apoyar la mente y el cuerpo en lo que se necesita para superar el trauma. Mi trabajo como Terapeuta de Juego Registrada me brinda mucha alegría al ver la dinámica familiar en juego y fomentar el cambio mientras construyo un apego seguro entre padres e hijos, mejoro la comunicación y, en última instancia, creo un sentido más profundo de amor y respeto por los miembros de una familia. . Mis formaciones en Terapia Sandtray y Neurobiología Interpersonal me han abierto los ojos al mundo de la teoría del apego desde la perspectiva de la neurobiología. En resumen, ofrezco una variedad de enfoques, ya que entiendo que no existe un solo enfoque de asesoramiento que se adapte a todos.